¿Qué lo llevó a integrarse al proyecto de Mapla en sus inicios?
Hace 9 años iniciamos este tema de poder juntarnos los mantenedores, ya que los mantenedores no contábamos con un espacio donde reunirnos: Todos los seminarios y congresos que tenían relación con minería era enfocados a los operadores, a la metalurgia o la minería.
El tema de la mantención misma venía como un agregado.
Pero la mantención es un tema muy relevante: Dentro del valor de la libra de cobre, el 35% se lo lleva la mantención. Por lo tanto, los mantenedores queríamos tener un espacio propio para conversar y ver cómo podíamos ir mejorando y alcanzar las mejores prácticas. Para mí es un orgullo haber estado en los inicios y ver que ya llevamos 9 años, porque hoy los mantenedores tienen su identidad. Yo creo que se han cumplido 100% las expectativas.
¿Qué opina de la organización de Gecamin en estos encuentros?
Cuando nosotros partimos, empezamos a ver quién nos podía ayudar para hacer el congreso. Yo creo que fue un acierto hacerlo hecho con Carlos Barahona (Gerente General de Gecamin), porque le da todo esto (muestra un salón lleno de stands de auspiciadores, donde se realiza un coffee break entre sesiones): esto uno como minero no lo obtiene. Uno se centraría sólo en las reuniones, pero yo creo que todo lo que hay detrás de un seminario es realmente mucho trabajo. Este encuentro, para hacerlo hoy día, significa un año de trabajo hacia atrás de Gecamin, con el único objetivo de que salga 10 puntos. El que se haya perdurado estos 9 años es gracias a Gecamin.