El destacado Consultor Internacional en Geoestadística de la Universidad Nacional de Ingeniería del Perú realiza un análisis de cómo ambos países han sabido complementar sus fortalezas en el área profesional minera.
¿Cuál es la sinergia profesional que hoy existe entre Chile y Perú en materia minera?
Existe una simbiosis. Una prueba es la 6° Conferencia de Muestreo y Mezclas (WCSB6) recientemente desarrollada en Perú, donde existió una importante presencia de profesionales de ambos países. Chile es un país de gran experiencia minera y nosotros estamos aprendiendo de la hermana república de Chile, en todos los aspectos.
Se puede constatar que los jóvenes de Chile y Perú están mirando con nuevos ojos estas nuevas posibilidades de integración profesional entre ambos países, lo que nos va a unir más.
¿Cuáles son las potencialidades de ambos países?
Los dos países tienen grandes proyectos. La economía peruana todavía tiene varios yacimientos que están en preparación. Es decir, va a seguir creciendo. Asimismo, en la medida que Chile crece siempre nos ha servido de ejemplo.
Los proyectos mineros que están en preparación van a traer necesidades técnicas y necesidades de capacitación y es ahí donde Chile nos puede ayudar. Muchos de nuestros jóvenes están viajando en búsqueda de especialización y preparación.
¿Qué tienen que aprender los profesionales chilenos del trabajo realizado en Perú?
Ambos países poseen una geología similar y por eso muchos geólogos chilenos vienen a reforzar y ampliar su aprendizaje. Nuestra naturaleza es tan compleja y pueden aprender de diversos tipos de yacimientos mineros. Los exploradores chilenos también han ayudado a descubrir yacimientos en Perú.
¿Chile y Perú pueden convertirse en una potencia conjunta?
Este apoyo y crecimiento va a seguir porque hay yacimientos tan grandes que recién vamos a comenzar a trabajar. En Perú, el proyecto Toromocho es un pozo de cobre que tiene un potencial de 700 millones de toneladas. Esto va a permitir que nuestros profesionales tengan mayor campo ocupacional y que los profesionales de Chile no sólo puedan ocuparse en su país. Ya se ha visto que afuera se están creando nuevas escuelas de geología y minería.